Si tú eres de esas personas a las que siempre les dicen “eres demasiado serio/a” o “Nunca sonríes” e inclusive te has ganado apodos como amargado, grinch o limón ya existe una explicación para esto. Ahora puedes culpar a tus padres por este hecho.
El portal fusión nos habla de un estudio reciente que ha encontrado que en nuestro código genético existe una predisposición que nos puede hacer ser personas completamente serias o ser una fuente desbordante de alegría.