Claro que esto no pasa así como así, tiene sus razones y aquí te decimos cuales podrían ser las causas.
Es la más conocida y obvia ya que cuando comes puede que se quede algo atorado ahí, lo que aumentará el número de bacterías y causa mal olor.
Los productos resultantes del tabaco también producen un mal olor bucal. Además, los fumadores tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades de encías, que también causa mal aliento.
Si no te lavas los dientes a diario, la descomposición de la comida causará mal olor. Además de la formación de placa, que al no ser removida irritará las encías y terminara llenando los huecos que quedan entre los dientes y encías, generando un problema conocido como periodontitis.
Algunos de los medicamentos que circulan contribuyen de forma indirecta al mal aliento al reducir o dificultar la producción de saliva. Otros lo hacen al descomponerse en el torrente sanguíneo y eliminar sus componentes a través de la respiración.
Heridas mal atendidas o infectadas son las primeras que pueden contribuir al mal aliento.
Si tu sufres de halitosis, es hora de revisar cual de estas causas podría ser la que te afecte, pero ten en cuenta que lo mejor que podrías hacer es ir con un especialista para que te ayude a identificar la razón de tu mal aliento.
