Ante lo inevitable, la dirigencia de la sección 34 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) decidió levantar el paro en las escuelas del estado.
Una decisión lógica si tomamos en cuenta que las demandas puestas sobre la mesa por el magisterio están siendo cumplidas o analizadas.
Y así, no hay movimiento popular que se sostenga.
Me explico.
La radicalización de la sección 34 los primeros días del movimiento provocó cierta esperanza entre aquellos que buscan la descomposición de la actual administración estatal.
Tiene salvaguardado su derecho constitucional a la queja y el pataleo.
Sin embargo, la estrategia aportada por el gobierno estatal, incluyendo el de hacer públicos los dichos en la mesa, puso en jaque la estrategia propuesta por el magisterio.
Al enterarse de la negociación y los avances que se daban, el movimiento se fracturó entre quienes veían atención a las demandas y quienes se sostenían en mantener el paro.
Los radicales tomaron posiciones y empezaron una soterrada campaña de desprestigio en contra de la dirigencia de la sección 34.
Una que circuló en whatsapp de profesores adscritos a esa sección.
¿Cuál fue el resultado?
1.- Que al avanzar la mesa de negociación y dar respuesta a su principal demanda, la entrega de becas a hijas e hijos de maestros, no había necesidad de mantener el paro.
2.- El anunció del levantamiento del paro ante miles de maestros que, minutos antes, mostraron músculo y se preparaban para una protesta de largo plazo.
3.- La descalificación de la dirigencia de la sección 34 por parte de los radicales, en especial de Filiberto Fraustro, quien quedó atrapado entre la espada y la pared.
Ante ello, fue el propio dirigente de la 34 quien puso sobre la mesa su renuencia “si las bases así lo querían”.
A partir de ese momento, permanezca o no en el cargo, la vacante de líder en la sección 34 está disponible.
La bendición
En la comunidad La Casita, en el municipio de Fresnillo, fueron liberadas 10 personas la tarde noche de este lunes. Un grupo especial de la Guardia Nacional que realizaba un operativo en la zona descubrió un campamento donde se encontraban retenidas, en contra de su voluntad, 5 mujeres y cinco hombres, incluidos menores de edad. Las personas que los tenían retenidos pudieron escapar debido a lo escarpado de la zona. Las 10 personas realizaban trabajos forzados en ese punto de la geografía zacatecana y en las próximas horas serán reintegradas a sus familias. Una buena noticia que exhibe el trabajo coordinado que se realiza en materia de prevención del delito en Zacatecas. Obvio, habrá quien descalifique el hecho con diversos argumentos. Lo que es un hecho es que estás personas, algunas retenidas desde el mes de diciembre del año pasado, regresan a sus casas sanas y salvas.
Auto de fe.
Y aún así, siguen profetizando el apocalipsis. Se entiende. Estuvieron en el reino del Señor.
