Hace unos años, el ser gordito (tener un poco de obesidad) era sinonimo de estar bien nutrido o por lo menos eso pensaba la gente pero en la actualidad, se ha convertido en un verdadero problema.
Pero ahora se esta buscando una forma de administrar un fármaco directamente a las células blancas de grasa, con el cual se busca convertirlas en células de grasa parda que pueden quemarse más fácilmente; los encargados de esto son el equipo de científicos de la Universidad de Purdue en Indiana.
En este nuevo estudio, los expertos utilizaron la ruta de señalización de Notch conocida por regular la diferenciación celular y la identidad celular. Gracias a la señalización Notch, una célula envía una señal a una vecina para controlar la transcripción genética de esta y su identidad.
Aunque por el momento esta vía de administración sólo ha sido probada en ratones. Los expertos han utilizado por primera vez una nanopartícula polimérica de ingeniería para el suministro controlado de un inhibidor de señalización Notch directamente en a las células blancas de la grasa.
Estas partículas tienen un tamaño inferior a 200 nanómetros y son fácilmente absorbidas por las células de la grasa a través de un proceso llamado tráfico endocrino.
Según explica Meng Deng, coautor del trabajo:
Podemos controlar la entrega de fármacos a sitios específicos en el cuerpo, en este caso las grasas malas o las células blancas de grasa. Una vez que esas partículas de ingeniería están dentro de las células de grasa, pueden liberar lentamente el fármaco en las células, limitando potencialmente las interacciones fuera del objetivo en otros tejidos del cuerpo y reduciendo la frecuencia de dosificación.
