Presiona finanzas públicas falta de adelanto de participaciones para pagar nómina magisterial

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El gobernador David Monreal Ávila mostró su apoyo a la manifestación que realizan los maestros estatales en la capital del estado.

En la misma, los profesores exigen el pago de su salario, el cual suma ya dos quincenas.

Aseveró que decidió acompañarlos en su lucha y en defensa de sus derechos.

Añadió que seguirá buscando una solución de fondo al pago de la nómina magisterial estatal.

Reconoció que existe una asignación de 2 mil millones de pesos en el Presupuesto estatal.

Sin embargo, advirtió que ese dinero tendrá que ser aportado por la Federación.

Y aunque se trata de un compromiso hecho, “se nos ha negado otorgar un anticipo de participaciones”.

La cifra, informó el gobernador, es de 500 millones de pesos; con la misma se cubriría la nómina.

La falta de este recurso ha producido presiones a las finanzas estatales.

De hecho, aseguró que el secretario de Finanzas, Ricardo Olivares Sánchez, se avoca a buscar los recursos que garanticen el pago del salario.

Esto, mientras se hace el traslado de la nómina magisterial a la Federación.

“De mi parte, estoy haciendo todo lo posible”.

Informó que buscará reunirse en la Ciudad de México con la secretaria de Educación y los titulares de Gobernación y Hacienda.

Esto, con el fin de insistir “que este asunto del pago del salario a los maestros se debe resolver de manera responsable”.

Llamó a la dirigencia magisterial a orientar de forma adecuada a los maestros y a hacerse responsables de sus dichos y sus hechos.

“El caos genera caos; la violencia genera violencia”.

Señaló que en el pasado, la dirigencia magisterial abandonó a los maestros y dejaron todo.

“Y hoy padecemos las consecuencias de esa irresponsbailidad”.

Abandono desde 2015

Recordó que en 2015 la Federación absorbió los gastos de las nóminas educativas de la mayoría de las entidades federativas.

Pero la entidad, con otros estados de la República, no se adhirieron a este esquema.

Subrayó que esta negligencia causó una gran presión al gasto en Zacatecas.

A grado tal que obligaron a sacrificar otras actividades como carreteras, infraestructura, generación de empleo y desarrollo.