Estamos seguros que siempre te han hablado de lo peligroso que es comer sopa Maruchan, que si te pegan los intestinos o que si dura meses dentro del estomago.
Lo que si es una realidad es que las sopas instantáneas contienen aditivos químicos, colorantes, saborizantes, demasiada sal y un aditivo llamado glutamato monosódico, el cual es casi un veneno.
Este aditivo es utilizado para dar más sabor a los alimentos industrializados, como caldos de pollo en cubitos, salsas, frituras, cubos de jitomate y sopas instantáneas.
Durante los años 60 se popularizó un sazonador de marca ajinomoto y fue retirado del mercado al descubrir que era altamente cancerígeno.
Después, en los restaurantes de comida china o japonesa se descubrió que algunos clientes empezaron a sufrir diversos trastornos que les afectaba la salud y que se caracterizaba con dolores de cabeza, irritación en los ojos, visión borrosa, taquicardia , sudoración excesiva, comezón generalizada, diarreas y asma, que fue conocido como el síndrome del restaurante chino.
En algunos casos se encontró que el Glutamato favorecía la aparición de células cancerígenas. En resumen, las sopas Maruchan contienen glutamato y gracias a esto puede provocar asma y cáncer.
Pero existe algo peor, pues al calentarse su envase de polietileno en el horno de microondas, el plástico del envase suelta dioxinas, o sea toxinas que provocan cáncer.
Por el momento no existe una regulación en contra de estos productos de este tipo y realmente depende de cada persona el arriesgarse a contraer enfermedades como asma, obesidad, diabetes y cáncer.